Autoconocimiento
Visitamos a los habitantes de La Casona
para compartir un café filosófico. Como todo buen café, fue preparado en el
momento, es decir que no llevábamos un tema predeterminado. Antes bien, una vez
que estuvimos sentados en círculo, Leonardo, quien animó en esta ocasión,
preguntó sobre qué tema nos gustaría conversar. Inmediatamente respondí: “cine”,
esto porque me llamó la atención que al momento de presentarse Andrea mencionó
que le gustaba el cine. –Cabe decir que iniciamos nuestra reunión
presentándonos cada uno, compartiendo algo de nosotros, de nuestros intereses,
gustos o actividades, por ejemplo–. Daniela propuso que habláramos sobre ética;
otra propuesta fue: “cine familiar”. La cuestión es que al decir “cine”, se
habló de personajes y la posibilidad de identificarnos con ellos, de reconocernos
en los otros y a través de ellos o en el contacto conocernos. Una intervención
siguió a otra y de pronto descubrimos que nuestro tema era el autoconocimiento.
Desde nuestra perspectiva, en Casa de
la Filosofía consideramos que el objetivo principal de la filosofía es
comprender para transformar, para mejorar. Así, planteamos a los participantes
la posibilidad de reflexionar y dialogar con base en tres preguntas: qué,
para qué y cómo. Evidente y naturalmente las conversaciones no
fluyen de manera tan ordenada, siguiendo una estructura rígida, por lo contrario,
el intercambio entre personas es orgánico, se constituye de partes que forman
un conjunto coherente, aunque su desarrollo no es lineal, sino creciente y
decreciente, con vaivenes, decires y desdecires, divagaciones y genialidades
incluidas. De este modo, con la intención de presentar lo sustancial de nuestro
intercambio, a continuación compartimos algunas de las ideas expresadas,
agrupadas en torno a las preguntas antes planteadas.
Qué es el autoconocimiento
Observarse; es la lectura de sí mismo; son
los gustos de cada uno; es el carácter; la propia historia; es la manera en qué
reacciono ante ciertas circunstancias, situaciones o estímulos; es lo que
siento, mis sentimientos.
Para qué autoconocerse
Para lograr el autocontrol; para
autoevaluarse y corregir, mejorar.
Cómo podemos autoconocernos
A través del arte; si somos espectadores,
público es probable que nos identifiquemos con los personajes del cine, el
teatro o la literatura; si somos creadores, artistas, al dar forma a nuestras
obras plasmamos en ellas una parte de nuestro ser, por lo tanto, cuando las
observamos nos descubrimos en ellas, nos autoconocemos.
Asimismo, en torno a cómo se da el
autoconocimiento, tocamos el tema sobre el vínculo entre cuerpo y mente, cuando
se dijo que el primer paso es ver, percibir, para después pensar, reflexionar
sobre lo visto, y de esta forma generar conocimiento. Palabras más, palabras
menos coincidimos en que sentidos-sensaciones, emociones-sentimientos, e
ideas-conceptos guardan una fuerte relación. Las emociones no sólo se sienten,
también se piensan; y, el conocimiento no sólo se piensa, también se siente.
Por último, compartimos tres observaciones
geniales: primera, Carolina y Daniela nos hicieron notar que el
autoconocimiento siempre implica relación con otras personas, que no se trata
de un proceso en que estemos aislados, encerrados en nosotros mismos, sino que
tiene lugar con los otros, hallándonos inmersos en el mundo. Con relación a
esto, Daniela subrayó que hacemos parte del universo, que el autoconocimiento
implica una relación con el exterior, con los demás, por lo que conocerse
implica conocer al otro. Segunda observación, el autoconocimiento no es un
objetivo que se logre de una vez y para siempre porque somos cambiantes,
crecemos y decrecemos; además, la imagen que los otros tienen de nosotros e
incluso la imagen que tenemos de nosotros mismos pueden ser sólo apariencias.
Visto así, el autoconocimiento siempre es un proceso en marcha e incompleto.
Tercera observación, autoconocerse no consiste sólo en teoría, es igualmente
práctica; es un desarrollo simultáneamente teórico y práctico. El
autoconocimiento se da viviendo, aunque esto no significa que quién ha vivido
más posea mayor autoconocimiento porque no siempre se reflexiona sobre lo
vivido, porque no siempre se piensa sobre lo visto, lo percibido. Se requiere
disposición, querer hacerlo, comentó Paula, médico residente en psiquiatría que
acompaña a nuestros nuevos amigos.
Karla Portela R. y Germán Leonardo
Cárdenas V.
Cajicá, Colombia, febrero 20 de 2023
No hay comentarios.:
Publicar un comentario